Entre las distintas herramientas místicas que nos ayudan a acceder al subconsciente, en esta ocasión, voy a hablaros del péndulo, que es utilizado desde la antigüedad en radiestesia.
Los péndulos sirven, en general, para amplificar la vibración interna del que trabaja con él, teniendo en cuenta la del ente del cual emana la pregunta o incertidumbre, que mediante él se pretende resolver.
Pensad que, el péndulo reconoce las radiaciones y vibraciones que emiten los cuerpos, ya sea de un lugar, de una persona o de un ente determinado; y por eso es tan interesante trabajar con él.
Lo importante es comprender, que nuestra conciencia y el inconsciente, se manifiestan de diferentes formas.
Entonces, los péndulos son excelentes instrumentos de adivinación, y a menudo, complementan el uso que de otras mancias se hace, ya que, como sabéis, existen otros medios, como el Tarot, que es otro de los artes místicos conocidos, que, al igual que la Astrología o la Gemoterapia, nos permiten acercarnos al mundo al que no se puede acceder sin ciertos condicionantes.
Igual sucede cuando pretendemos comunicarnos con el otro mundo: un tablero de Ouija nos ayuda a establecer contacto con las fuerzas invisibles del más allá (aunque, no es la única forma que tenemos de establecer contacto con ellas, pues hay otras menos agresivas).
Y, para las brujas como yo, dedicadas al mundo de lo espiritual, el péndulo me sirve como medio de comunicación o información cósmica. E incluso, lo suelo utilizar también, para establecer comunicación con el otro mundo, ya que en sus balanceos, pueden interpretarse mensajes concretos, que provienen, bien de diversas almas, guías invisibles u otras energías o entidades. Por lo tanto, también pueden ser seres fallecidos quienes muevan ese péndulo, y no precisamente nuestro Ser Superior, el inconsciente, o guías espirituales.
Sobre la forma de utilizarlo, puedo deciros que, hay que sostenerlo entre el pulgar y el índice. La palma de la mano estará relajada, para que el instrumento pueda moverse libremente. Pero si no se es un bruj@ con experiencia, no debe tratarse de un péndulo pesado. Cuánto de corta o larga sea la cadena del péndulo es algo que queda a la libre elección de quien lo utilizamos.
Pero, es básico infundirle una intención. Si no, no podemos trabajar con él. Además, es fundamental que así sea, ya que el péndulo no deja de ser un instrumento en el que se abre una puerta espiritual.
También debemos presentarnos ante él (debemos conectarnos con él, y mientras lo sostenemos ante nuestras manos, se medita sobre su utilización). Si lo escuchamos bien, él nos dirá si sus movimientos son acertados. Aunque es verdad, que para llegar a oir esto, primero tenemos que haber aprendido a percibir con todos nuestros sentidos.
Para usarlo, podéis deslizar la cadena alrededor de vuestro dedo meñique, o colocar la bola entre el dedo anular y el meñique para asegurar que no se caiga.
Mantened la mano bien quieta para utilizarlo o apoyaos con el antebrazo sobre la mesa, para así poder utilizarlo con más estabilidad.
A la hora de ir a utilizarlo, hay que prepararse, teniendo un momento para meditar: El lugar para utilizarlo, ha de ser un sitio tranquilo y silencioso. Y hay que apagar cualquier aparato electrónico o de comunicación que esté cerca de nosotr@s.
Además, hay que encender las correspondientes velas o el incienso. Y si es preciso, poner una música como la que os señalo en el apartado al que podéis acceder clicando sobre estas líneas, ya que os ayudarán a conectaros con otras frecuencias.
Además, hay que estar de pie cuando se trata de reconocer algún lugar, o cuando estamos interactuando con algún ente del más allá, o bien permanecer sentad@, cómodamente.
También es bueno centrarse en la respiración, mantras u otras formas de meditación, tal como os he señalado anteriormente.
Tengo que explicaros, además, que en función de la energía o materia con la que vaya a trabajar, escojo una u otra variedad de mineral.
El cuarzo rosa es apropiado, cuando se quiere pendular sobre el amor. E igualmente, las piedras péndulo deben limpiarse y nutrirse regularmente.
En cuanto a los movimientos del péndulo, el movimiento que sigue a las agujas del reloj (en sentido horario) se llama diestro y se interpreta como la respuesta positiva “sí”.
Y, el movimiento de las agujas del reloj en la dirección opuesta, se interpreta como respuesta negativa (de “no”).
Para las personas zurdas, el mecanismo del péndulo funciona justamente alrevés.
Aunque no quiero que nadie se lleve a engaño en cuanto a esto anterior, pues hay muchos más movimientos que el péndulo puede hacer: Girar en vertical o en eje horizontal, oscilar a lo largo de cualquier dirección, moverse a lo largo de una línea recta… O dibujar trazos erráticos y deambulantes. También puede quedarse quieto. O en fin, puede realizar una amplia gama de movimientos varios, como dibujar círculos estrechos o que se amplifican, o hacer movimientos más rápidos, más lentos o en espiral, o puede emitir temblores…
Pero en fin, son todos ellos movimientos, que nos podemos encontrar al utilizar el péndulo, y todos ellos, pueden tener un significado concreto. No por ser éstos diferentes al giro que hacen las agujas del reloj, dejan de tener validez.
La cuestión está, en que a ellos también puede perfectamente, y de hecho, así debe ser, infungírseles un significado, y mediante esta codificación, es como vamos a interpretar esos movimientos que el mismo vaya haciendo.
El péndulo tiene muchas cosas que comunicarnos, y no solamente lo hace en forma de movimientos: de sí o no.
En mi caso, si el péndulo se queda detenido en línea recta, capto una traba sobre la cuestión en sí que se esté tratando de analizar.
Pero sea como sea, si os ha gustado esta entrada, os animo a que la compartáis y a que permanezcáis atentos a la web, ya que futuramente, es muy posible que se hagan otras publicaciones donde podré explicaros muchos secretos más sobre este maravilloso y místico instrumento, que sin duda, es uno de mis favoritos.